Mapamundi tradicional chinés

El papel de China en el conflicto militar entre Rusia y Ucrania

El estallido de la guerra en Ucrania fue tanto el estallido final de una disputa de 30 años entre Rusia y EE.UU. sobre la expansión de la OTAN hacia el este, como un acontecimiento histórico en el colapso completo del orden mundial desde la Segunda Guerra Mundial. En general, la batalla geopolítica en Europa que desencadenará esta guerra frenará el desplazamiento de Estados Unidos, de Europa a la región de Asia-Pacífico. Por otra parte China estará más capacitada y decidida a desempeñar un papel más importante en la construcción del nuevo orden internacional. El nuevo orden mundial avanza hacia un "pluralismo profundo". 
Apartados xeográficos China e o mundo chinês
Palabras chave China Galicia internacional
Idiomas Castelán

El estallido de la guerra en Ucrania fue tanto el estallido final de una disputa de 30 años entre Rusia y EE.UU. sobre la expansión de la OTAN hacia el este, como un acontecimiento histórico en el colapso completo del orden mundial desde la Segunda Guerra Mundial. En general, la batalla geopolítica en Europa que desencadenará esta guerra frenará el desplazamiento de Estados Unidos, de Europa a la región de Asia-Pacífico. Por otra parte China estará más capacitada y decidida a desempeñar un papel más importante en la construcción del nuevo orden internacional. El nuevo orden mundial avanza hacia un “pluralismo profundo”. 

¿La guerra en Ucrania y el restablecimiento del orden mundial?

El mundo actual es un lugar diverso, no sólo con la Rusia de Putin, sino también con la India de Modi, la Turquía de Erdogan, Francia y Alemania en la Unión Europea, etc. Es un periodo en el que cada potencia construye su propia imagen del futuro orden mundial, a menudo con expectativas contradictorias, incapaz de alcanzar un consenso estratégico sobre los intereses fundamentales, o incluso sin la voluntad de hacer compromisos estratégicos. 

Para China, la guerra en Ucrania ha complicado aún más la situación mundial actual. Es necesario analizar con calma los nuevos cambios y tendencias en la interacción de las grandes potencias, ser más racionales y no ser sólo emocionales; cualquier impulso emocional podría provocar errores estratégicos subversivos.

Pero una cosa está muy clara: lo que hace que una gran potencia sea una gran potencia, o que se la considere una gran potencia, no radica en su capacidad para desafiar el viejo orden, y mucho menos hacer la guerra, sino en su responsabilidad y capacidad para impulsar y mantener la paz internacional.

La emergencia de China y las precauciones de EE.UU. contra China

La política neoconservadora hacia China se formó en 2001, justo después de la toma de posesión de la administración Bush. Luego Obama fue el primer presidente posterior a la Guerra Fría que desplazó el enfoque estratégico de EE.UU. hacia el este, hacia China, siendo en su política emblemática, la estrategia de Pivot to Asia. Posteriormente la administración Trump publicó el primer Informe Indo-Pacific Strategy Report. En la actualidad, el equipo de seguridad nacional de la administración Biden fue heredado del de Obama, siendo su pensamiento sobre China muy similar al de Trump, convirtiendo a Biden en un afinador y fiel ejecutor de esa continuidad que une a conservadores y demóicratas sobre China.

Pero ahora Putin ha sorprendido a Europa, a Estados Unidos y al mundo con una guerra total en Ucrania. Para los estadounidenses, la afirmación de que “China es la mayor amenaza para Estados Unidos” es realmente cuestionable desde hace años.