Los cambios en la producción y explotación de hidrocarburos iraquíes luego de la invasión internacional de 2003

Según diversas fuentes, Irak posee reservas de petróleo probadas de 112 mil millones de barriles y reservas probables calculadas en 215 mil millones de barriles (10% del total mundial) y algo menos de la mitad de las de Arabia Saudita (26%). Según la Dirección de Información Energética de Estados Unidos (EIA, Energy Information Administration), hasta un 90 por ciento del territorio iraquí permanece sin explorar, por haber sufrido durante décadas sanciones económicas y guerras lideradas por Estados Unidos.

Apartados xeográficos Oriente Médio
Idiomas Castelán

Según diversas fuentes, Irak posee reservas de petróleo probadas de 112 mil millones de barriles y reservas probables calculadas en 215 mil millones de barriles (10% del total mundial) y algo menos de la mitad de las de Arabia Saudita (26%). Según la Dirección de Información Energética de Estados Unidos (EIA, Energy Information Administration), hasta un 90 por ciento del territorio iraquí permanece sin explorar, por haber sufrido durante décadas sanciones económicas y guerras lideradas por Estados Unidos.

La extracción de un barril de crudo en esta área, dada la escasa profundidad de los yacimientos y la abundancia de hidrocarburos, costaba en 2003 menos de un dólar norteamericano en contraposición con los costos en otras partes del mundo, donde llegaban a ser de hasta ocho dólares.

Irak se mantuvo como miembro de la OPEP entre 1991 y 2003 pero, debido al embargo, permaneció fuera de la cuota de cartel. Este Estado no podía volver a las cuotas de la OPEP en tanto sus exportaciones permanecieran debajo de los niveles de 1991, por lo que resultaba del interés de Irak una pronta recuperación de las mismas y de su rol en la OPEP.

Yacimientos, oleoductos, refinerías y terminales de exportación

Con anterioridad a la Primera Guerra del Golfo (1991), la producción era de 3,1 a 3,5 millones b/d y se estimaba que podría llegar en 2010 a 6 millones y a 7 millones en 2020.En mayo de 1997, el Director General de Planificación Petrolera de Irak expresó que podían alcanzarse en un año los 3 millones de barriles diarios y para ello estableció que debía recomenzar la actividad en los pozos, atraer capitales extranjeros para el desarrollo de nuevos yacimientos y activar la actividad en el desierto occidental. Un mes después el gobierno abrió rondas de licitaciones y unas 60 empresas extranjeras demostraron interés en participar. El resultado de las licitaciones llevadas a cabo en ese año otorgó yacimientos y áreas de exploración a diversas compañías, entre las cuales no ingresaron petroleras estadounidenses.

Obviamente, una vez aseguradas las áreas, las compañías ganadoras se mantuvieron sin realizar inversiones pues el país estaba limitado en sus exportaciones por el programa de la ONU “Petróleo por Alimentos”. Por su parte, a finales de 2002, Saddam Hussein exigió a las compañías que habían ganado las licitaciones que comenzaran a operar o perderían sus franquicias.

En marzo de 2004 el nuevo gobierno del Irak post-Saddam estaba dispuesto a revisar los acuerdos firmados en 1997 con la rusa Lukoil —principalmente el yacimiento West Qurna— y con la francesa Total —principalmente el yacimiento Majnoon—, negociados con Saddam Hussein, si bien no se considera en la obligación de honrarlos. Lukoil firmó con el gobierno a principios de marzo de 2004 un memorando de entendimiento que incluía entrenamiento de operarios iraquíes. Por su parte, Total llevaba años de tratativas y sostenía en las negociaciones que poseía derechos exclusivos.

Principales pozos productores en millones de barriles y compañías involucradas desde 1997

Majnoon (TotalFinaElf –Francia-) 20.000
West Qurna (Lukoil, Zarubezhneft, Tatneft, Mashinoimport, Rosneft –rusas- y una Cía. Iraquí) 15.000
East Bagdad (Empresas rusas) 11.000
Kirkuk (Zarubezhneft y Tatneft –rusas-) 10.000
Rumaila (Zarubezhneft, Mashinoimport, Rosneft –rusas- y CNCP –China-) 10.000
Nahr bin Umar ( Zarubezhneft, Rosneft–rusas-, Slavneft –Belarús-Rusia- y TotalFinaElf –Francia-) 6.000
Halfaya (BHP -Australia-, CNCP –China-, Corea del Sur y AGIP -Italia-) 5.000
Bay Assan (Zarubezhneft y Tatneft –rusas-) 2.000
Buzurgan 2.000
Khabbaz 2.000
Nasiriya (ENI –Italia-, Repsol –España-) 2.000
Khurmala (Turkish Petroleum Intl. Co.) 2.000
Abu Ghirab 1.500
Ratawi (Petronas –Malasia-, CanOxy –Canadá- y Crescent -EAU-) 1.500
Suba (Rusia, India, Argelia e Indonesia) 700
Al Ahdab (CNCP –China- y Norimco) S/D
Az Zubayr (Zarubezhneft)

Oleoductos

En 1975 se construyó el oleoducto Estratégico —o Norte-Sur—, de doble vía, que le permite transportar crudo del norte hacia el Golfo Pérsico (Mina al-Bakr) y petróleo del sur a través de Turquía a Ceyhan, en el mar Mediterráneo Oriental. La razón de este trazado era que permitía, ante el volátil entorno de Medio Oriente, exportar hacia el norte en caso de conflictos en el golfo Pérsico o hacia el sur si la situación no permitía el uso del ducto al Mediterráneo oriental. De todos los ductos, este era el único que tenía permitida la exportación durante la etapa de “petróleo por alimentos”.

No tenían actividad debido a las sanciones:

El oleoducto de Kirkuk a la terminal siria —Estado muy inestable y con graves conflictos en la actualidad—del que se desprenden un ramal a Líbano y dos a Turquía, paralelos, uno proveniente de Basora y el otro de Kirkuk.

Otro oleoducto conectaba con la red de Arabia Saudí, que permitía exportaciones a través del Golfo Pérsico y el Mar Rojo. Oleoductos menores relacionaban los yacimientos con los oleoductos troncales, los centros de consumo y los puertos de exportación.
Existía un oleoducto a Jordania —Zarqa, con una longitud de 300 kms- y se planeaba ampliarlo con un costo de 120 millones de dólares. Este plan era de gran interés de Stroitransgaz —empresa rusa, habilitada en el Bloque 4— e Indian Oil. Otras 35 firmas internacionales manifestaron interés en esta ruta.

Depuesto el régimen de Saddam Hussein surgió la posibilidad de otra ruta desde Mosul —región kurda de Iraq— hasta el puerto de Haifa, en Israel septentrional. Esta ruta eliminaría a Rusia como abastecedor de petróleo a Israel, que enfrenta dificultades para abastecerse con hidrocarburos de sus vecinos. Sus dificultades con Siria obligan a que el ducto de exportación deba trazarse por Jordania(1). De todos modos este plan es contrario a los objetivos establecidos para la guerra por EE.UU. y el Reino Unido pues, ambos Estados, rechazaron que el petróleo fuera la motivación para esta guerra. Aún así, el cuidado de los pozos al momento de la invasión y el objetivo del “cambio de régimen” resultan evidencias en el sentido opuesto.

El proyecto del oleoducto a Aqaba (vía Jordania) —favorito durante la administración Reagan— era muy conveniente para los intereses del gobierno en Medio Oriente. Pasaría por Jordania —un aliado—, restaría poder a Siria —exportador de petróleo no alineado con EE.UU.— y reduciría el poder de Arabia Saudí al aportar a EE.UU. otro proveedor de petróleo barato. La falta de fondos impidió su construcción en aquel momento. Asignado entonces a la estadounidense Bechtel, ahora que es parte de la “reconstrucción” iraquí, esta empresa revivió sus planes de construcción de ese oleoducto.

Hacia fines de 2004, Iraq planeaba exportar petróleo a través de un nuevo oleoducto de menos de 10 kms. hacia Irán. Las estaciones de bombeo impulsarían 400.000 b/d desde los yacimientos de Basora al puerto iraní Abadan en el Shatt al-Arab. El proyecto incluye un oleoducto para exportar fuel oil iraquí y otro para importar productos iraníes.

Este proyecto —aprobado por la Coalición— es parte de la cooperación bilateral que también abarca control de la frontera común entre ambos Estados para evitar el ingreso de elementos terroristas “extranjeros” y la organización de los peregrinajes de iraníes a los lugares sagrados chiítas en Iraq, que registraron los ataques de Baghdad y Kerbala. Por el momento, Irán pidió a sus fieles que no realizaran peregrinajes al país vecino y las fronteras siguen cerradas, iniciativa también sostenida por EE.UU. En la frontera se duplicó el personal de seguridad —inicialmente de 8.000 efectivos— y puede incrementarse más si es necesario.

Terminales portuarias

• Mina al-Bakr: la mayor terminal iraquí, sólo parcialmente reconstruida luego de la Primera Guerra del Golfo.
• Khor al-Amaya: también debió ser reparada. Está situada unos 50 kms. offshore en el golfo Pérsico.
• Khor al-Zubair.
• Basora.
• Umm Qasr.

Solamente el primero de los mencionados puertos estaba autorizado por la ONU —desde 1995— para exportar hidrocarburos.

Como consecuencia de la Primera Guerra del Golfo, las sanciones que recayeron sobre Iraq le impidieron efectuar exportaciones de petróleo.
En los años subsiguientes, alimentar a 24 millones de habitantes ya constituía un serio desafío ante el gran deterioro de los yacimientos —principalmente Kirkuk, en el norte— debido a la falta de repuestos y a las vetustas técnicas de recuperación del combustible que, si no eran actualizadas rápidamente, producirían una declinación irreversible en la producción. En ese momento, Iraq recurría a técnicas de alto riesgo para mantener el rendimiento de sus yacimientos.

A pesar de las sanciones, EE.UU. era el principal mercado para el petróleo iraquí. Sus importaciones —a través de terceros— oscilaban entre 700.000 y un millón b/d de petróleo iraquí. En 2001 el 80% del producto de Basora y el 20% del proveniente de Kirkuk tuvieron a EE.UU. como destino, con ExxonMobil, Chevron, Citgo, BP, Maratón, Coastal, Valero, Koch y Premcor como los mayores importadores, generalmente encubiertos(2) (3) Un 30% de crudo era vendido inicialmente a firmas rusas y el resto a compañías de Chipre, Sudán, Pakistán, China, Vietnam, Egipto, Italia, Ucrania entre otras.

A principios de 2002 producían petróleo 24 sobre 73 yacimientos iraquíes.

Durante 2002 Iraq exportó un promedio de 2 millones de barriles diarios —sin contar el exportado de contrabando—, en el marco del programa de la ONU “Petróleo por Alimentos” y medicinas(4). El retorno de los inspectores debería permitir —de acuerdo con una ronda ONU-Iraq realizada en Viena en julio 2002— el levantamiento total de las sanciones. Pero los inspectores no pudieron terminar su trabajo. Debieron refugiarse en Chipre la noche previa al inicio de la invasión, sin encontrarse —ni entonces ni después—, rastros de armas de destrucción masiva en Iraq, principal argumento para justificar la Segunda Guerra del Golfo.

El fin de la ocupación militar de EE.UU. no significa que los iraquíes tengan pleno control de su petróleo. Si bien el ejército estadounidense ha puesto fin, formalmente, a la ocupación de Iraq, algunas de las compañías petroleras más grandes de Occidente, como ExxonMobil, BP y Shell, aparecen en el nuevo mapa iraquí(5).

Un comunicado de prensa de la Casa Blanca fechado el 30 de noviembre 2011 y titulado “Declaración conjunta de Estados Unidos y de la República de Iraq a través del Alto Comité de Coordinación” decía: “[…] EE.UU. se compromete a ayudar a la República de Iraq a desarrollar el sector energético. Juntos, estamos explorando diferentes vías, entre las que se incluye una mejor protección de las infraestructuras esenciales, para contribuir al aumento de la producción petrolera de Iraq”.

A principios de 2012 BP ya se encontraba en el gigantesco campo petrolífero Rumaila y Royal Dutch Shell en la otra gigantesca reserva de Majnún. Entre las empresas actuales también se encuentran CNPC (China National Petroleum Corporation) en Rumaila, ExxonMobil con Royal Dutch Shell en el proyecto Fase 1 de Qurna Occidental, se adjudicó a la italiana Eni SpA, junto con California’s Occidental Petroleum y Korea Gas Corp. el yacimiento Zubair. Shell, junto con Petronas, ganó un contrato para el gigantesco campo de Majnún, uno de los más grandes del mundo, con unas reservas valoradas en hasta 25.000 millones de barriles.

 

Citas Bibliográficas:

(1) Peimani, Homan. “In the pipeline: More regimen change”. En Asia Times. Abril 3 de 2003. www.atimes.com/atimes/Middle_East/ED04Ak01.html

(2) Millar, Judith y Lipton, Eric. “Report Cites U.S. Profits in Sale of Iraqui Oil Ander Hussein”. En The New York Times. Octubre 9 de 2004. http://www.nytimes.com/2004/10/09/international/middleeast/09sanctions.html

(3) Hosenball, Mark. “Saddam Oily Deals. Were Americans profiting fron Oil-for Food scams?”. En Newsweek. Enero 25 de 2005. http://msnbc.msn.com/id/6831548/site/newsweek/

(4) Existen grandes fluctuaciones: en junio de 2001 Irak exportó 1,13 millones de b/d. En abril del mismo año 2,95 millones b/d.

(5) Dahr Jamail. “Las empresas petroleras occidentales se quedan en Iraq aunque las fuerzas estadounidenses se vayan”. En Al Jazeera (www.aljazeera.com), 8 de enero de 2012. Traducido del inglés para IraqSolidaridad por Consuelo Delgado.